De acuerdo a nuevas teorías, cada agujero negro del universo contiene un “pequeño” universo paralelo. De esta misma forma, todo nuestro universo podría ser un “pequeño” agujero negro creado en otro universo mucho más basto. ¡Vaya lío! ¿Y así hasta cuándo? ¿Hay un universo padre de todos? Los nuevos detalles de la teoría los puedes leer tras el hiperespacial salto.
La teoría en sí misma no es del todo nueva (existía al igual que otras muchas), pero el físico Nikodem Poplawski, de la Universidad de Indiana, ha presentado nuevos modelos matemáticos del movimiento espiral de la materia que cae en un agujero negro. Estas ecuaciones sugieren que los “agujeros de gusano” (túneles entre diferentes regiones del universo o universos) son alternativas viables a las singularidades espacio-temporales que Albert Einstein predijo que se hallarían en el centro de los agujeros negros.
En pocas palabras y de acuerdo a las ecuaciones de la relatividad general, las singularidades son puntos en el espacio-tiempo que no ocupan espacio y con densidad infnita. Si Poplawski está en lo cierto, esto no tiene por qué ocurrir así: la materia absorbida podría ser expulsada en otra realidad, a través de un “agujero blanco”, constituyendo así la “materia prima” para sus estrellas, galaxias, o lo que quiera que se forme allí.
De modo que la materia de un universo, incluido el nuestro, vendría de otro universo. No se han observado agujeros blancos hasta la fecha, pero el Big Bang podría ser perfectamente uno: toda la materia que cayó en un agujero negro y se comprimió, se expulsó de golpe en un momento del pasado. Una teoría fascinante, aunque sigue uno preguntándose si hubo un primer universo, o si siempre han venido todos a través de agujeros negros. ¿Hasta dónde se remonta la existencia?
El Global Hawk es un vehículo aéreo no tripulado o VANT que lleva varios años surcando los cielos de mano de la fuerza aérea estadounidense con fines militares. Sin embargo, la NASA ha iniciado una misión llamada Global Hawk Pacific (Glopac), en la que se usa uno de estos juguetitos para recorrer 8.300 kilómetros en una misión científica.
El mexicano Gilberto Esparza, ha creado plantas robots que se alimentan de aguas sucias, utiliza los desechos del agua para generar energía, el proyecto se denomina “plantas nómadas”, estos robots contienen plantas adentro y funcionan de forma simbiótica con ellas.
Vegetación y microorganismos conviven dentro de la máquina. Cuando las bacterias requiere alimento, el robot autosuficiente se mueve a las orillas de ríos contaminados y “bebe” agua. A través del procesamiento de una celda de combustible biológica, los elementos contenidos en el agua son descompuestos y transformados en energía eléctrica que puede alimentar los circuitos del robot.
El exceso es utilizado por las plantas, permitiendo que completen su propio ciclo de vida. El proyecto es realizado en el Centro de Arte y Creación Industrial de Gijón en España, como una forma de llamar la atención respecto al rol de las máquinas en las grandes ciudades.
Grigori Perelmán es un matemático ruso que ha hecho históricas contribuciones a la geometría riemanniana y la topología geométrica. En particular, demostrando la conjetura de geometrización de Thurston, que resuelve la famosa conjetura de Poincaré, propuesta en 1904 y considerada como uno de los Siete Problemas del Milenio (más importantes problemas abiertos y difíciles de las matemáticas). En el 2006, cuando fue reconocido el trabajo de se le otorgó la Medalla Fields (equivalente al Nobel de las Matemáticas) en el marco del XXV Congreso Internacional de Matemáticos con sede en Madrid, la cual rechazó.
Sur Noticias 01 Marzo 2010 Según informaron científicos de la NASA, el movimiento telúrico inclinó el planeta 8 centímetros y acortó la duración del día sábado.
Lo descubrieron a través de fotografías de unas zanjas en las laderas de cráteres, ubicados en el hemisferio sur del planeta. La búsqueda del fluido fuera de la Tierra apasiona a los científicos durante décadas, dado que se vincula con las formas de vida.