Adelgazar de forma saludable es el objetivo de muchas personas que desean verse mejor y, sobre todo, cuidar su salud. No obstante, en la búsqueda de esta meta, hay quienes prueban diferentes métodos y dietas, pero no siempre ven resultados.
Entonces, ¿es posible adelgazar? Por supuesto. Para ayudarte, te dejamos una serie de consejos probados que te serán útiles para alcanzar tu peso ideal.
La hipnosis como herramienta para adelgazar
La hipnosis es una técnica que se vale de la relajación y la sugestión para influir en el comportamiento y los patrones de pensamiento de una persona. En el caso de bajar de peso, mucho se habla sobre el método Samandi, un enfoque de hipnosis para adelgazar que se centra en reprogramar la mente subconsciente para cambiar los hábitos alimentarios y promover una relación saludable con la comida.
En este proceso de cambio, la hipnosis se revela como un camino fascinante para alcanzar la meta de adelgazar. La técnica Samandi, especializada en este propósito, se apoya en la relajación y sugestión para reprogramar el subconsciente, actuando como un timón hacia hábitos alimentarios más saludables. Esta modalidad no solo ataca los síntomas evidentes del sobrepeso, sino que va más allá, explorando las causas fundamentales. Al construir una conexión positiva con la comida, se establece un fundamento sólido para que el cambio sea duradero. La hipnosis como catalizador de transformación, despierta una nueva perspectiva hacia la salud y el bienestar.
Pero como es bien sabido, esto no es lo único que se puede hacer para adelgazar y lo que es aún más importante, para que no se presente el tan temido efecto rebote. Así que a continuación dejamos algunos recordatorios que debes tener siempre presente para mantener un peso saludable:
Come de forma balanceada
La clave para adelgazar está justamente en la alimentación saludable, nutritiva y balanceada que incorpore frutas, verduras, proteínas magras y granos integrales. Prepara porciones adecuadas y presta atención a las señales de saciedad para no comer de más.
Asimismo, es importante que tomes suficiente agua a lo largo del día para que tu metabolismo se active y tengas menos hambre.
Reduce el consumo de azúcar y alimentos procesados
Es bien sabido que el azúcar contribuye al aumento de peso y a la aparición de diversas enfermedades. Por eso, consume lo menos posible aquello que tenga alta cantidad de azúcar, como el caso de las gaseosas y postres.
De igual forma, elige alimentos frescos y naturales en lugar de los procesados, los cuales tienen muchas calorías y pocos nutrientes.
Control de los antojos
Muchas veces, no se tiene hambre, sino antojos. De ahí que es crucial aprender a distinguir las señales de hambre real y comer únicamente cuando sea así.
En el caso de los antojos, busca alternativas saludables, como las frutas frescas en lugar de dulces o palomitas de maíz en lugar de patatas fritas.
Realiza actividad física
El ejercicio contribuye a la mejora del estado de salud en general y se ha comprobado que hay rutinas que te ayudan a bajar de peso. Sin embargo, es recomendable que encuentres alguna actividad física que te guste, puesto que así será más fácil para ti cumplir con la rutina de entrenamiento.
Para hacer actividad física no necesariamente debes ir a un gimnasio o cancha, sino que puedes incorporarla diariamente, por ejemplo, en lugar de usar el ascensor, sube las escaleras, o camina en lugar de conducir.
Descansa y controla el estrés
Los hábitos de sueño influyen en muchos aspectos de la vida, incluyendo el peso. Por lo tanto, si quieres adelgazar, es conveniente que duermas y descanses lo suficiente para que tu cuerpo se recupere y regule adecuadamente las hormonas relacionadas con el apetito.
Por otro lado, también debes controlar el estrés, para lo que pueden servirte técnicas de relajación como el yoga, la meditación o el contacto con la naturaleza.
Cultiva una mentalidad positiva
La actitud que tienes para adelgazar es también importante para estar más cerca de tu objetivo. En este sentido, no te concentres en aquello que no puedes comer, más bien, céntrate en elegir alimentos de forma saludable.
También es recomendable celebrar los logros por muy pequeños que parezcan, por ejemplo, bajar unos cuantos gramos o unos pocos kilos. Esto te ayudará a mantener la vista fija en tu meta y a darte cuenta de que es posible alcanzarla.