Microsoft está estudiando reactores nucleares de nueva generación para alimentar sus centros de datos y su IA, según una nueva oferta de empleo para alguien que lidere el proceso.
En la era digital en constante evolución, la Inteligencia Artificial (IA) ha emergido como uno de los campos tecnológicos más prometedores y demandantes en la actualidad.
La aplicación de la inteligencia artificial (IA) en la administración pública tiene el potencial de mejorar la eficiencia, la toma de decisiones y la prestación de servicios a los ciudadanos. Sin embargo, también enfrenta varias limitaciones y brechas que deben abordarse para maximizar sus beneficios y mitigar riesgos.
Un nuevo análisis muestra que las herramientas de IA de "código abierto", como Llama 2, siguen estando controladas por las grandes empresas tecnológicas de diversas maneras.
La cómica estadounidense Sarah Silverman ha demandado a OpenAI, fabricante de ChatGPT, y al gigante tecnológico Meta, alegando que se han infringido sus derechos de autor en el entrenamiento de los sistemas de IA de estas empresas.
El mundo de la tecnología está repleto de innovadores y emprendedores que han dejado una marca indeleble en la industria. Entre estos nombres destacados se encuentra Sam Altman, un joven prodigio que ha trabajado incansablemente para impulsar el campo de la inteligencia artificial y la informática.
Aunque el lanzamiento al mundo de ChatGPT catalizó la revolución de la IA generativa que estamos experimentando actualmente, el camino hasta hoy ha sido mucho más largo de lo que podría pensarse.
Potencie sus capacidades de aprendizaje e investigación con herramientas de IA, que le permitirán obtener una ventaja competitiva y alcanzar nuevos niveles de comprensión.
ChatGPT se ha convertido en la palabra de moda del año y es difícil desplazarse por las redes sociales y no verla mencionada. Pero resulta que nadie sabe realmente lo que significa.
Neuralink, de Elon Musk, acaba de obtener la aprobación de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) para estudiar implantes cerebrales humanos. Pero, ¿está esto allanando el camino para resolver algunos de los mayores problemas de la sociedad o creando un futuro inquietante para la humanidad?
Google no perdió tiempo en lanzar su chatbot de IA Bard a principios de 2023 tras la revelación de ChatGPT en Microsoft Bing, pero quizá debería haber ahorrado un poco de tiempo. Bard se lanzó con fallos embarazosos, y Google sigue disculpándose por la IA. No es que Bard sea peor que otras IA generativas, pero la propia Google es un centro de información. Producir un producto que miente es una experiencia nueva para Google, por lo que se recomienda a cualquiera que utilice Bard que compruebe los hechos con, lo has adivinado, una búsqueda en Google.
La digitalización, la automatización y la IA están teniendo un profundo impacto en los mercados de trabajo, y los empleos poco cualificados o los que implican tareas repetitivas corren un mayor riesgo de ser sustituidos por la IA.
Una herramienta de IA generativa llamada WormGPT, que funciona sin los límites éticos ni las limitaciones codificadas de servicios legítimos como ChatGPT de OpenAI o Google Bard, se está vendiendo ahora mismo a operadores cibercriminales en la red oscura, según se ha descubierto.
El riesgo de extinción humana provocado por la evolución de la inteligencia artificial es una amenaza real a la que hay que hacer frente ahora, advierten los principales científicos y líderes tecnológicos de la IA.
Los reguladores estadounidenses están investigando a la empresa de inteligencia artificial OpenAI por los riesgos que supone para los consumidores que ChatGPT genere información falsa.
Los reguladores estadounidenses están investigando a la empresa de inteligencia artificial OpenAI por los riesgos que supone para los consumidores que ChatGPT genere información falsa.