La organización Al Qaeda del Magreb Islámico amenaza con llevar a cabo atentados con explosivos «indetectables» durante el Mundial de fútbol que se disputará desde junio en Suráfrica, según un comunicado aparecido en el portal islamista «Mushtaqun Lel Jannah» (Anhelo del paraíso). En la declaración, que apunta como objetivos a los combinados de EE.UU., Inglaterra, Francia, Alemania e Italia, se señala lo «asombroso» que sería observar como «en un partido transmitido en directo en un estadio lleno de espectadores se siente el sonido de una explosión... y el número de cadáveres se cuenta por decenas o centenares».
Uno de los partidos amenazados es el que disputarán las selecciones de EE.UU. e Inglaterra el 12 de junio. «¡Qué increíble sería el partido Inglaterra-EE.UU.!... si Alá quiere».
El comunicado recuerda acciones terroristas como el ataque del pasado diciembre en Afganistán que acabó con siete empleados de la CIA, así como el atentado fallido del nigeriano Faruk Abdulmutallab, quien el día de Navidad intentó hacer estallar un avión que unía Amsterdam y Detroit. Para ello, el terrorista logró ingresar en el aparato hasta 50 gramos de explosivo tras cruzar decenas de controles de seguridad. Una acción que para Al Qaeda fue la «mayor humillación» sufrida por la inteligencia estadounidense en su historia.
«Todos los controles de seguridad y aparatos de rayos X que EE.UU. enviará después de leer esta declaración no serán capaces de detectar explosivos como los que se colocarán en los estadios por una simple razón que anunciaremos en su momento», amenaza la organización.
El pasado marzo, fuentes de los servicios de seguridad británicos ya advirtieron que terroristas islámicos estarían trabajando en la ocultación de explosivos en implantes de silicona -sobre todo mamarios-, una novedosa técnica que los convertirían «en casi indetectables».
Pero pese al fulgurante anuncio, lo cierto es que ésta no sería la primera vez que la red terrorista centra su objetivo en el Mundial de fútbol. El pasado año, el diario de Botsuana «Sunday Standard» ya denunciaba la detención de decenas de islamistas que habrían utilizado el país como base para la planificación de atentados en suelo surafricano.
De igual modo, el cantante de origen somalí K´naan, quien interpretará durante la ceremonia de inauguración el himno del Mundial -«Waving Flag»-, también ha recibido en los últimos días numerosas amenazas por parte de simpatizantes de Al Shabab. Una organización que la Administración Obama vincula con la rama de Al Qaeda en el Cuerno de África.
Suráfrica promete seguridad.
El comunicado -realizado con numerosos errores tipográficos y en el que se cita a «Mister Platter» y no a Joseph Blatter como presidente de la FIFA- sí que sería la primera alusión directa a la cita mundialista por parte de la organización Al Qaida del Magreb Islámico, un grupo que, en noviembre de 2009, secuestró a los cooperantes españoles Albert Vilalta, Roque Pascual y Alicia Gámez -de los cuales, tan sólo la última ha sido liberada- y que ya ha obligado a la suspensión de otros eventos como el rally París-Dakar.
Para evitar una nueva debacle deportiva y social, el ministro de Seguridad de Suráfrica, Nathi Mthetwa, anunció ayer que durante el Mundial tropas del Ejército patrullarán junto a 55.000 policías y 200 agentes de Interpol las calles de las sedes. Suráfrica espera recibir cerca de medio millón de turistas.
Fuente: ABC