Cuando el japonés Chitetsu Watanabe nació en 1907, la esperanza de vida promedio de Japón rondaba los 40 años. Más de un siglo después, la cifra se ha duplicado. Watanabe vivió tres décadas más de los esperado. Murió en su natal Niigata, en el norte de Japón, el pasado domingo a los 112 años, informó Associated Press.
Un par de semanas antes de su muerte, el libro Guinness de los récords reconoció a Watanabe como "El Hombre más viejo del mundo” a los 112 años y 344 días. En la ceremonia del 12 de febrero, en la que recibió un certificado de Guinness que decía “el número uno del mundo”, Watanabe “apretó el puño triunfante”, según The Mainichi, el periódico de mayor circulación en Japón.
Durante la ceremonia celebrada en el asilo donde vivía, Watanabe atribuyó su larga vida a la tendencia de siempre evitar la ira y en su lugar procurar la mayor cantidad de sonrisas. Su nuera, Yoko Watanabe, confirmó que el hombre vivía con esos ideales.
“He vivido con él más de 50 años, y nunca lo he visto alzar la voz o enojarse”, dijo Yoko Watanabe. “Él también se preocupa por los demás. Cuando estaba pasando por un momento difícil, él fue el que más se acercó para ver cómo me sentía. Creo que haber vivido con una gran familia bajo un mismo techo, mezclarse constantemente con sus nietos y bisnietos, ayudó a que siempre mantuviera esa sonrisa.”
Watanabe nació el 5 de marzo de 1907, y fue el mayor de ocho hijos. Después de terminar la escuela y mudarse a Taiwán para trabajar en las plantaciones de azúcar, conoció a su esposa, Mitsue, y juntos tuvieron cinco hijos. Sirvió en el ejército japonés, pero la primera pasión de Watanabe parecía ser la agricultura: cultivó una pequeña granja familiar de frutas y verduras hasta los 104 años y recortó y exhibió árboles bonsai japoneses tradicionales hasta los 100 años.
Cuando dejó de cultivar, su amor se volvió hacia los dulces, incluidos los pasteles de crema y las natillas, informó la AP.
La causa de la muerte de Watanabe no se informó, aunque Yoko Watanabe le dijo a The Mainchi que tenía dificultades para comer y que tuvo fiebre y problemas para respirar en los últimos días. El periódico detalló que su descendencia está compuesta por cinco hijos, 12 nietos, 16 bisnietos y un tataranieto.
Japón suele estar bien posicionado cuando se habla de longevidad. La esperanza de vida promedio del país es de 84, según datos del Banco Mundial, junto con Hong Kong y Suiza.
A diferencia de la esperanza de vida de los Estados Unidos, que hasta hace poco había estado en declive, la longevidad japonesa ha crecido constantemente, aumentando más de cuatro años en un cuarto de siglo. La dieta japonesa de vegetales y pescado es comúnmente señalada como una de las causas de una larga vida y útil. La investigación ha señalado una compleja red de factores que contribuyen a las poblaciones de larga vida, incluida la asequibilidad y la accesibilidad del sistema de atención médica, la actividad diaria y el estrés ambiental de un país.