Era aún madrugada en el Perú cuando la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) declaraba en París, Francia, Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad a la Fiesta de la Virgen de la Candelaria de Puno.
Tras conocerse la noticia, las viviendas en Puno se embanderaron y, por la tarde, los conjuntos de sicuris empezaron a desfilar hacia el Santuario de la Mamacha Candelaria a ofrecer retretas en su honor. El gobernador de Puno, René Calsín, anunció que hoy es feriado no laborable en toda la región.
El viceministro de Patrimonio Cultural e Industrias Culturales, Luis Jaime Castillo, destacó que el Perú asume el compromiso de mantener en el tiempo esta importante festividad.
“Es un patrimonio de toda la humanidad y, como tal, hayun compromiso del país: que la tradición no se pierda, que no se corrompa, que no se cambie y esto significa que haya más atención; y, por otro lado, que la fiesta se realice con la propiedad que se ha llevado hasta ahora”, dijo.
Para el Ministerio de Cultura, el reconocimiento “representa un ejemplo positivo de salvaguardia de una expresión de patrimonio inmaterial gracias a la participación y al consenso de la población por mantener viva esta celebración multitudinaria que enorgullece al pueblo puneño”.
En Puno ya se echó a andar una comisión de salvaguardia de la festividad, tal como recomienda Unesco, para elaborar planes, mejorar la presentación y organización de la festividad, fortalecer y preservar sus manifestaciones culturales.
El presidente regional de Puno, Mauricio Rodríguez, comentó que se trató de un trabajo “arduo y consistente, ya que esta tradicional festividad fue, de alguna manera, torpedeada por los hermanos de Bolivia, que no querían que el reconocimiento mundial se concrete”.
El viceministro Castillo recordó que la postulación estuvo relacionada exclusivamente con el culto a la Virgen, por lo que el reclamo que presentó el vecino país de Bolivia por sus danzas fue resuelto tras una reunión con funcionarios de ese país.
La Unesco ha reconocido como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad a toda la festividad puneña dedicada a la Virgen de la Candelaria. Esto incluye tanto las misas, la del alba del primer día como las de la víspera y la fiesta; la ceremonia de purificación ancestral; el recorrido de la imagen sagrada en procesión por las calles de Puno acompañada de danzas y músicas tradicionales; los dos certámenes donde compiten 170 agrupaciones quechuas y aimaras; los alferados del día principal, de la octava; la entrada de kapus; el conocimiento de las danzas y la fabricación de las máscaras, la entrada de la caballería; las danzas de sikuris, k’ajelos, ayarachis, morenadas, diabladas, doctorcitos, llameradas y otros. Y la transmisión de todo este saber a los más jóvenes
Fuente: El Peruano