Los ingenieros de sistemas o informáticos, tienen hoy en día una gran laboral en realidad cada empresa debería de contratar estos profesionales, pero para hacerlo necesitan que estos profesionales sean capacitados al mas alto nivel.
A pesar de la creciente demanda de servicios tecnológicos en el país, motivo suficiente para que la mayoría de estudiantes y futuros ingenieros de sistemas decidan desarrollar su profesión en el Perú, el 69% de estudiantes de pregrado de las principales universidades nacionales de esta carrera estarían pensando en migrar al extranjero.
Así lo revela un estudio de Lolimsa, principal firma peruana desarrolladora y exportadora de plataformas tecnológicas especializadas en salud.
El panorama se torna complicado si es que esta tendencia se mantiene, por lo que al 2015 solo quedarían 929 profesionales de ingeniería de sistemas –recién graduados– para que junto a 4.900 que ya están graduados y/o titulados, según la Asamblea Nacional de Rectores (ANR), respondan a un mercado cuyas exportaciones de software pasarían de US$ 28 millones a 59.8 millones, del 2011 al 2015.
Entre las principales razones que sostienen los futuros profesionales destaca que un 38% tiene interés de realizar estudios de posgrado en el extranjero para mejorar su formación profesional y enfrentar con mayor éxito las exigencias del mundo empresarial y laboral, así como acceder a mejores perspectivas económicas en la profesión, puesto que las remuneraciones en general son más bajas en comparación con las que perciben los profesionales –incluidos los ingenieros de sistemas– de los países desarrollados.
Sin embargo, el nivel de competitividad de los profesionales tecnológicos en el Perú es uno de los más bajos (puesto 62 en una escala mundial comparativa con 66 países). En la categoría de capital humano sigue en descenso (pasando del puesto 57 al 62, del 2009 al 2011), según el Índice de Competitividad de la Industria de TIC’s de la Economist Intelligence Unit para Business Software Alliance.
Según cifras de Promperú, la industria del software en el 2009 tenía en su haber 300 empresas de software, de las cuales el 63% eran microempresas, 27% eran pequeñas empresas y 10% eran medianas o grandes empresas.
Todas estas empresas generaban casi 6.000 empleos directos y 9.000 empleos indirectos.