Una estrategia para llegar a los más jóvenes
El proceso es sencillo de entender. Hasta no hace demasiado, las campañas solidarias recaudaban fondos a través de cuentas bancarias o con la inscripción como socios de ciudadanos que debían pagar una cuota fija al mes o al año.
Sin embargo, las nuevas generaciones no funcionan en absoluto de esta forma. De esto se han dado cuenta tanto las ONG como particulares con un cierto afán filantrópico. Los más jóvenes presentan un tipo de movimiento social en el que la solidaridad pasa por la pantalla de un smartphone sin la menor duda.
De igual forma que disfrutan de videojuegos o que pasan horas navegando por Internet, las donaciones que se ven motivados a hacer han tomado un carácter mucho más tecnológico que en épocas anteriores.
Pero no solo los más jóvenes ven en las herramientas digitales móviles una llave para acceder a todo lo que quieran, la integración en la cultura digital de nuestra sociedad es casi completa, por lo que es difícil encontrar a alguien que no prefiera donar dinero a través de una app que por medios más convencionales y un tanto más incómodos.
Apps solidarias
Existen muchas ya en la actualidad. Por ejemplo, una propuesta como Just Text Giving pretende que sus usuarios donen para diferentes causas benéficas a través de mensajes de texto en los que ellos eligen la cantidad que quieren dar.
Hay algunas aplicaciones más originales. Sin ir más lejos, CharityMiles se compromete a realizar donaciones en nombre de sus usuarios en función de la distancia que ellos corran en el día a día, una buena excusa para ponerse en forma y ser solidarios.
Pero las ONG clásicas también se han sumado a esta tendencia. Organizaciones como MSF o UNICEF cuentan con apps móviles desde las que se puede donar una cantidad elegida por el usuario para cualquiera de los proyectos desarrollados por los expertos en el terreno.
Sin duda alguna, hoy la tecnología es clave para entender todos los factores del mundo, por lo que la solidaridad no se iba a quedar fuera de una corriente que parece imparable.