La escalada de Android para convertirse en el sistema operativo más usado en móviles y tablets lleva fraguándose tiempo y ya es algo que nadie puede parar y que salvo cambios drásticos en la industria, el imperio Android es ya casi una realidad.
Gracias a que es “libre” y que muchos fabricantes lo usan está claro que los demás sistemas operativos no pueden competir al mismo modo. Sí, Android es genial, pero también tiene bastantes problemas.
Ya son varias las veces que Android es víctima del malware, siendo la última y una de las más notorias el troyano descubierto hace unos días, que haciéndose pasar por una aplicación normal al instalarlo grababa nuestras conversaciones en la SD y luego podían ser enviadas sin que nos diéramos cuenta a un servidor.
Pero estas cosas son difíciles de controlar, ya que al poder instalar aplicaciones descontroladas debemos ser nosotros mismos quien tengamos cuidado. Aún así, la seguridad de Android podría ser mucho mejor, puede mejorarse con aplicaciones de terceros sí, pero debería traer muchas de esas funciones de serie.
Y aquí es donde está otro problema en Android, la fragmentación por parte de los fabricantes y también en los dispositivos. Cada fabricante tiene su versión tuneada de Android que convierte a este sistema en una amalgama de variedades demasiado extensa que marea y a veces hace las cosas incompatibles.
Además muchos dispositivos de marcas no muy conocidas no tienen la “bendición” de Google, haciendo que les falten muchas aplicaciones y que otras muchas no funcionen. La posible solución a homogeneizar sería obligar a los fabricantes a la posibilidad de instalar su versión o la versión estándar.
Pero es que además, hasta que no llegue Android 4 existe una barrera entre tablets y smartphones que no tiene mucho sentido, además de quedarse poco a poco atrás con respecto a iOS 5 y WP7 Mango en cuestión de interfaz.
También según un estudio reciente, comparado con Meego es muchísimo menos libre, teniendo Google un control casi total sin que nadie ajeno a ellos pueda aportar modificaciones o contribuciones.
Aunque no todo es malo, está claro que Android es genial pero hace falta seguir puliéndolo y aunque un usuario avanzado puede ponerlo mucho mejor, utilizarlo para desarrollar, experimentar y solventar muchos de sus fallos, debería facilitarse para el usuario no experto.
Sobre todo mejorar como los fabricantes lo implementan dejando a los usuarios desamparados con un móvil que casi nunca será Android sólo, sino con una modificación que deberíamos poder elegir si tener o no.
Espero que Android 4, solvente muchas de estas cosas y haga de este genial sistema operativo uno mucho mejor, más seguro y para todo tipo de usuarios.
Pero estas cosas son difíciles de controlar, ya que al poder instalar aplicaciones descontroladas debemos ser nosotros mismos quien tengamos cuidado. Aún así, la seguridad de Android podría ser mucho mejor, puede mejorarse con aplicaciones de terceros sí, pero debería traer muchas de esas funciones de serie.
Y aquí es donde está otro problema en Android, la fragmentación por parte de los fabricantes y también en los dispositivos. Cada fabricante tiene su versión tuneada de Android que convierte a este sistema en una amalgama de variedades demasiado extensa que marea y a veces hace las cosas incompatibles.
Además muchos dispositivos de marcas no muy conocidas no tienen la “bendición” de Google, haciendo que les falten muchas aplicaciones y que otras muchas no funcionen. La posible solución a homogeneizar sería obligar a los fabricantes a la posibilidad de instalar su versión o la versión estándar.
Pero es que además, hasta que no llegue Android 4 existe una barrera entre tablets y smartphones que no tiene mucho sentido, además de quedarse poco a poco atrás con respecto a iOS 5 y WP7 Mango en cuestión de interfaz.
También según un estudio reciente, comparado con Meego es muchísimo menos libre, teniendo Google un control casi total sin que nadie ajeno a ellos pueda aportar modificaciones o contribuciones.
Aunque no todo es malo, está claro que Android es genial pero hace falta seguir puliéndolo y aunque un usuario avanzado puede ponerlo mucho mejor, utilizarlo para desarrollar, experimentar y solventar muchos de sus fallos, debería facilitarse para el usuario no experto.
Sobre todo mejorar como los fabricantes lo implementan dejando a los usuarios desamparados con un móvil que casi nunca será Android sólo, sino con una modificación que deberíamos poder elegir si tener o no.
Espero que Android 4, solvente muchas de estas cosas y haga de este genial sistema operativo uno mucho mejor, más seguro y para todo tipo de usuarios.