Ya hemos visto hacer crecer una oreja humana en el lomo de un ratón, pero esta vez se trata de un órgano mucho más complejo, un ojo, y sin necesidad de utilizar a un pobre ratón como base. Descubre a continuación más detalles de este avance médico en el uso de células madre.
Esta técnica desarrollada por un grupo de investigadores japoneses del centro RIKEN de biología desarrollada en Kobe, permite el crecimiento espontáneo de un ojo rudimentario, formado por una retina, fotorreceptores y neuronas, de 2mm de tamaño, similar al de un ratón recién nacido.
Para ello han utilizado las células madre de ratones y mientras siguen mejorando el proceso esperan poder utilzarlo con células madre humanas dentro de 2 años.
Gracias a esto y unido al trasplante de células fotorreceptoras que ya se ha realizado con ratones, se podrán curar y buscar soluciones a multitud de afecciones del ojo y se da un paso más hacia la misterpotatización de la humanidad.