Un grupo de 33 estados, entre ellos California y Nueva York, han demandado a Meta Platforms Inc. por perjudicar la salud mental de los jóvenes y contribuir a la crisis de salud mental juvenil al diseñar a sabiendas funciones en Instagram y Facebook que hacen que los niños se vuelvan adictos a sus plataformas.
La demanda presentada ante un tribunal federal de California también afirma que Meta recopila de forma rutinaria datos de niños menores de 13 años sin el consentimiento de sus padres, en violación de la ley federal.
"Los niños y adolescentes están sufriendo niveles récord de mala salud mental y las empresas de medios sociales como Meta son las culpables", dijo la fiscal general de Nueva York, Letitia James.
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"Meta se ha lucrado con el dolor de los niños diseñando intencionadamente sus plataformas con características manipuladoras que convierten a los niños en adictos a sus plataformas al tiempo que disminuyen su autoestima."
La amplia demanda es el resultado de una investigación dirigida por una coalición bipartidista de fiscales generales de California, Florida, Kentucky, Massachusetts, Nebraska, Nueva Jersey, Tennessee y Vermont.
Es consecuencia de informes periodísticos condenatorios, publicados por primera vez por The Wall Street Journal en otoño de 2021, basados en la propia investigación de Meta, según los cuales la empresa conocía los daños que Instagram puede causar a los adolescentes -especialmente a las chicas adolescentes- en lo que respecta a la salud mental y los problemas de imagen corporal.
Tras los primeros informes, un consorcio de organizaciones de noticias, incluida The Associated Press, publicó sus propias conclusiones basadas en documentos filtrados de la denunciante Frances Haugen, que ha testificado ante el Congreso y una comisión parlamentaria británica sobre lo que descubrió.
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El uso de las redes sociales entre los adolescentes es casi universal en Estados Unidos y en muchas otras partes del mundo. Según el Centro de Investigación Pew, hasta el 95% de los jóvenes estadounidenses de 13 a 17 años declaran utilizar alguna plataforma de redes sociales, y más de un tercio afirma hacerlo "casi constantemente".
Para cumplir la normativa federal, las empresas de redes sociales prohíben a los menores de 13 años registrarse en sus plataformas, pero se ha demostrado que los niños sortean fácilmente las prohibiciones, tanto con el consentimiento de sus padres como sin él, y muchos niños más pequeños tienen cuentas en las redes sociales.
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Otras medidas que las plataformas sociales han tomado para abordar la preocupación por la salud mental de los niños también son fáciles de eludir. Por ejemplo, TikTok introdujo recientemente un límite de 60 minutos por defecto para los usuarios menores de 18 años. Pero una vez alcanzado el límite, los menores pueden introducir un código de acceso para seguir viendo.
En mayo, el Dr. Vivek Murthy, Cirujano General de Estados Unidos, pidió a las empresas tecnológicas, los padres y los cuidadores que tomaran "medidas inmediatas para proteger a los niños" de los daños de las redes sociales.
