Francia comenzó hoy a deportar a los primeros integrantes de un grupo de 700 gitanos a sus países de origen, como parte de un endurecimiento de la política de seguridad del gobierno, pese a las críticas de políticos y grupos contra el racismo.
El gobierno francés organizó para este jueves dos vuelos a Rumania con 93 gitanos, cada uno de los cuales aceptó “voluntariamente” regresar a su país por una suma de 380 dólares, reportó el diario Le Figaro.
Los gitanos rumanos repatriados llegaron este jueves a las 14:00 horas GMT a Bucarest, la capital rumana, en dos vuelos regulares desde Lyon y París. Otro vuelo con un centenar de personas partirá mañana viernes, informó el Ministerio del Interior.
El gobierno planea el regreso de 700 gitanos a sus países de origen antes de fines de agosto, luego de que desmanteló unos 50 campamentos.
El gobierno francés ha justificado la medida por motivos de seguridad, tras señalar que en esos campamentos hay “tráfico ilegal”, condiciones de vida “escandalosas” y “explotación de menores para la mendicidad, la prostitución y el delito”.
Rumania y Bulgaria han criticado al gobierno francés por realizar las deportaciones, mientras la Comisión Europea indicó que vigilará estas expulsiones para asegurarse de que Francia cumple las reglas de libre circulación.
Las autoridades francesas denuncian que los gitanos deportados, pese a ser ciudadanos europeos, se instalaron en territorio francés de forma irregular.
Desde principios de 2010, Francia ha realizado 25 repatriaciones, incluida ésta. En la actualidad hay unos 15 mil gitanos en territorio francés que viven, en su mayoría, en campamentos u ocupando casas abandonadas.
En 2009, al menos 10 mil gitanos fueron repatriados a Rumania y Bulgaria, según cifras del Ministerio francés de Inmigración.
Fuente: Crónica.com