El autismo en niñas puede incluir síntomas como apego fuerte a objetos y evitar el contacto visual. Sin embargo, los médicos pueden subdiagnosticarlo debido a factores como el enmascaramiento, los estereotipos y otros motivos.
El autismo es una condición del desarrollo que afecta la capacidad de una persona para comunicarse e interactuar con otros. Sin embargo, los síntomas pueden variar ampliamente entre las personas. En el caso de las niñas, la presentación de estos síntomas puede ser diferente, lo que complica su diagnóstico.
Síntomas del autismo en las niñas
Los síntomas del trastorno del espectro autista (TEA) son amplios y no todas las personas presentan todos los signos. Entre los síntomas significativos en niñas, se encuentran:
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Dificultades sociales y de comunicación:
- No responder al nombre a los 12 meses.
- Dificultad para seguir instrucciones.
- No señalar objetos interesantes a los 14 meses.
- Pérdida de habilidades adquiridas, como decir palabras previamente aprendidas.
- Preferir jugar solas.
- Evitar el contacto visual.
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Conductas repetitivas y rutinas estrictas:
- Apego inusual a objetos o juguetes.
- Balancearse de lado a lado.
- Dedicar tiempo a organizar objetos.
- Respuestas inusuales a olores, sabores o sonidos.
- Dificultades motoras.
Diferencias en los síntomas entre niños y niñas
Un estudio de 2019 sugiere que las niñas son más propensas a enmascarar los síntomas en entornos sociales para adaptarse a las normas sociales. Además, una revisión de 2022 destacó que las niñas pueden tener respuestas sensoriales más marcadas y menos patrones de intereses restringidos.
Las diferencias de edad y cultura pueden acentuar estas variaciones. Por ejemplo, niñas con TEA pueden mostrar fascinación por objetos aleatorios, como calcomanías o lápices, y jugar de manera obsesiva y repetitiva.
Subdiagnóstico del autismo en niñas
Factores que contribuyen al subdiagnóstico:
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Investigaciones centradas en niños:
Los diagnósticos se basan principalmente en estudios de casos masculinos, lo que excluye características más comunes en niñas. -
Enmascaramiento:
Las niñas tienden a ocultar sus síntomas, especialmente en entornos sociales, lo que dificulta su detección. -
Estereotipos:
Los prejuicios, como pensar que las niñas son naturalmente más tranquilas, pueden llevar a ignorar señales de autismo. -
Diagnósticos erróneos:
Es común que se confunda el autismo con condiciones de salud mental como ansiedad o depresión.
Niveles de autismo
El TEA se clasifica en tres niveles según el grado de apoyo necesario:
- Nivel 1: Apoyo para desafíos sociales, como mantener amistades.
- Nivel 2: Apoyo sustancial para superar dificultades sociales.
- Nivel 3: Apoyo muy significativo para comunicarse y adaptarse a normas sociales.
Diagnóstico temprano y apoyo
Aunque no hay una prueba médica específica, los médicos pueden monitorear síntomas desde los 2 años mediante preguntas sobre hitos del desarrollo. En casos menos obvios, los niños mayores pueden ser derivados a especialistas para evaluaciones más detalladas.
Incluso si un niño presenta algunos síntomas, esto no garantiza que tenga TEA. El diagnóstico temprano es crucial para acceder a apoyo especializado y comprender mejor el comportamiento del niño.
Resumen
El autismo puede ser menos frecuente en diagnósticos en niñas, pero ocurre. Las diferencias en la manifestación de síntomas y las herramientas de evaluación actuales pueden retrasar la detección en niñas. Comprender los síntomas y los hitos de desarrollo infantil puede ayudar a identificar el autismo temprano.