El Inti Raymi, la fiesta más esperada del Cusco que se celebra cada 24 de junio, tuvo como escenario principal la magestuosa ruinas de Sacsayhuaman y albergó a más de 38,000 personas entre peruanos y extranjeros y 500 artistas.
Desde las primeras horas de hoy, comenzó el desplazamiento del Inca en el Coricancha para posteriormente dirigirse a la plaza de armas de la ciudad y culminar en Sacsayhuaman.
El Inca, representado por el cusqueño Edmundo Cosco Cusirimay, ofreció un espectáculo con todo su séquito, que dejó complacida a las más de 3,000 personas que se deleitaban muy cerca de la zona de espectáculo y que pagaron más de 80 dólares por cada butaca, pero no crean que fueron solo ellos los asistentes, porque en el cerro contiguo se pudo apreciar más de 35,000 personas.