Frente a la desaceleración del gasto público anunciada por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) en la víspera, la Cámara de Comercio de Lima (CCL) sostuvo que dicha medida se justifica no solo porque ayudará a cumplir con el déficit fiscal meta previsto, sino porque contribuirá a preservar los fundamentos macroeconómicos del país, con lo que se garantiza un correcto manejo de nuestra economía y, por consiguiente, se garantiza el crecimiento económico previsto.
La CCL recordó que si bien, la crisis financiera internacional nos condujo a la necesidad de aplicar una política fiscal expansiva a través de la ejecución de un Plan de Estímulo Económico (PEE) equivalente a 3,9% del PBI, ahora que el componente privado (inversión privada y demanda interna) se ha reactivado, la reducción del gasto público es comprensible.
“Aun cuando el 57% del PEE se asignó a obras de infraestructura y el 21% a programas de protección social, el objetivo principal era compensar la caída en la inversión privada con una mayor inversión pública, pero ahora que se han retomado los proyectos de inversión postergados por crisis internacional es necesario hacer correcciones en la ejecución del gasto público porque de mantenerse el ritmo de gasto actual el déficit fiscal a fin de año llegaría a 2,4% del PBI, superando ampliamente el 1,6% previsto. En una coyuntura como la actual, con una notoria recuperación de la demanda interna privada, reducir el gasto público es una medida adecuada”, señaló la CCL.
El gremio empresarial recordó que a pesar de que la política fiscal en el Perú tiene un carácter discrecional, ello no ha significado dejar de lado un manejo responsable de las cuentas fiscales y una clara muestra de ello se refleja en los superávits fiscales obtenidos entre los años 2006 y 2008.
“La medida anunciada por el MEF de desacelerar el crecimiento del gasto público se justifica debido a la necesidad de cumplir con el déficit fiscal meta considerado en el Marco Macroeconómico Multianual. A lo que se suma a las modificaciones al fondo de estabilización de precios del combustible, la reducción del gasto corriente (bienes y servicios), el restablecimiento de la reserva de contingencia y la postergación de los proyectos de inversión que aún no se hayan iniciado”, añadió.
Para la CCL todas estas medidas se justifican si tomamos en cuenta que para el presente año se estima, según estimaciones del IEDEP, una tasa de crecimiento del PBI de 4,9% y un incremento en la inversión privada de 5,9%.
“Con estas proyecciones ya no se justifica mantener el estímulo fiscal y, en cambio, la política del MEF debe dirigirse a garantizar la estabilidad macroeconómica y preservar sus principales fundamentos, como un déficit fiscal mínimo y sostenible que permita mantener el grado de inversión y continuar con un nivel de riesgo país por debajo del promedio de América Latina”, remarcó.
Tasa de interés de referencia
Respecto a la decisión de mantener o incrementar la tasa de referencia del Banco Central de Reserva (BCRP), como se ha escuchado en estos días, la CCL sostuvo que aun cuando algunos analistas mencionan que el ente emisor debería incrementar su tasa de referencia como parte del retiro del estímulo monetario, es necesario tener en cuenta que la inflación subyacente se encuentra aún en niveles razonables (1,85%) y que cambios en la tasa de interés pueden afectar otras variables importantes de la economía como el tipo de cambio.
“De presentarse la necesidad de incrementos en la tasa de referencia, estos deben ser paulatinos para evitar cambios bruscos en la economía”, anotó.