El incidente, ocurrido a primera hora de la mañana, arrojó el viernes miles de litros de agua, peces y escombros a las calles de la capital alemana.
Un enorme acuario situado en el vestíbulo del hotel Radisson Blu reventó el viernes, arrojando miles de litros de agua, peces tropicales y escombros a las gélidas calles de Berlín (Alemania).
Cuando el acuario AquaDom, de 15 metros de altura y 38 de ancho, descrito por sus creadores como el acuario independiente más grande del mundo, explotó antes de las 6 de la mañana, hora local, despertó a los huéspedes del hotel de su sueño y obligó a su evacuación, según varios medios de comunicación, entre ellos The New York Times.
Al menos dos personas fueron trasladadas al hospital por heridas causadas por cristales rotos, informó el diario, después de que casi 100 socorristas llegaran al lugar de los hechos, cerca de la céntrica plaza de Alexanderplatz.
Unos 300 huéspedes fueron evacuados del hotel.
"Es una imagen de devastación con montones de peces muertos y fragmentos rotos", dijo Sandra Weeser, miembro del parlamento federal que se alojaba en el hotel, en una entrevista con una cadena de televisión local, añadiendo sobre los peces: "Los que podrían haberse salvado murieron congelados".
En el acuario cilíndrico, que rodeaba el ascensor de cristal del hotel y permitía ver la vida marina desde dentro, había unos 1.500 peces tropicales de 100 especies.
"Los peces que han sobrevivido están siendo trasladados de la forma más segura posible", declaró al Times Markus Kamrad, funcionario del Senado de Berlín. "Nuestro plan A es reactivar la electricidad. El plan B sería llevarlos a un lugar seguro, y tenemos algunas ofertas de lugares que dicen estar dispuestos a acogerlos."
No se sabe cual fue el Motivo
Las autoridades desconocen aún el motivo del incidente, pero estaban investigando cualquier problema estructural que pudiera haber afectado al hotel como consecuencia de la explosión.
Sandra Weeser, diputada del Parlamento federal alemán que se había alojado en el hotel, declaró a la televisión local que se había despertado por "una especie de onda expansiva" y describió la escena fuera del hotel como un "cuadro de devastación".
Dijo que los peces que podrían haberse salvado habían muerto congelados y recordó haber visto un "gran pez loro tirado en el suelo, congelado".
El acuario se modernizó hace dos años y en su interior hay un ascensor de paredes transparentes para uso de los visitantes. Algunas de las habitaciones del hotel se anuncian con vistas al acuario.
El cuerpo de bomberos de Berlín informó de que más de 100 bomberos habían acudido al lugar y que no estaba claro qué había provocado la rotura.
Los bomberos utilizaron perros de rescate para buscar posibles heridos en el interior del hotel, pero no encontraron a nadie.
La policía dijo que "cantidades masivas" de agua estaban fluyendo en las calles cercanas y que la gente en la zona debería conducir con precaución.